El jardín de nuestro hogar es un lugar expuesto constantemente a millones de microorganismos y animales maliciosos, que pueden llegar a convertirse en una plaga que ataque la vida de nuestras plantas. Lo más importante es conocer qué tipo de plagas hay, para poder identificarlas y erradicarlas antes de la que la salud del jardín se vea comprometida. Conoce las plagas más comunes y presta atención a los consejos para eliminar plagas.

Plagas más comunes

Una de las plaga más comunes y que más se extienden por el jardín es la de los pulgones. Estos insectos son pequeños y, mediante su pico, absorben la savia de las plantas y las debilitan, hasta su muerte, si no se elimina la plaga. Los hay de diferentes colores: amarillos, negros, marrones y, los más comunes, verdes.

Las cochinillas son unos microorganismos blancos que, tras convertirse en plaga, formando escudos blancos, provocan la deformación de las hojas y su caída. Del mismo color, la mosca blanca es otra de las plagas más habituales. Este insecto segrega una sustancia pegajosa que se adhiere a las plantas donde anida el hongo negrilla. Esto provoca que las hojas de las plantas pierdan color y se deformen. La araña roja es de apenas 1 milímetro y muy traicionera, debido a que no es apreciable a simple vista.

Otras plagas proliferan por el exceso de humedad existente en la zona. Es el caso de la botritis o del moho gris, que aparecen en las hojas también por falta de iluminación y aire; y la roya, un hongo que prevalece en primavera y otoño y aparece por haber humedad en exceso, lo que provoca en las hojas de las plantas la aparición de bultos que se transforman en manchas amarillas, rojizas o marrones.

Consejos contra las plagas

A la hora de escoger una planta, primero deberás cerciorarte de que está perfectamente sana, sin heridas ni enfermedades. A partir de ahí, hay algunos consejos que te resultarán útiles para prevenir o eliminar las plagas en jardin. En primer lugar, deberás escoger una planta que se adapte a las condiciones climatológicas de tu hogar o jardín. Posteriormente, analiza el suelo y labra bien la tierra, abonándola como es debido, antes de realizar un trasplante o plantar una semilla.

Una vez que la planta y el suelo estén sanos, deberás usar algún insecticida contra las plagas con frecuencia. Si detectas algún tipo de plaga o enfermedad, lo ideal es que cortes las ramitas y hojas afectadas y laves bien el resto de la planta con agua y algún jabón con pH neutro. También hay insecticidas y fungicidas naturales, de origen orgánico. El aceite de verano elimina muchos parásitos; el aceite de invierno elimina cochinillas, pulgones y hongos; y el pelitre elimina pulgones, mosca blanca y ácaros.

En definitiva, para tener un jardín sano, solo tienes que tener un poco de cuidado y asegurarte de que la planta está sana; y, si detectas alguna plaga, debes actuar lo antes posible para eliminarla mediante una poda selectiva o un lavado a presión o aplicando insecticidas y fungicidas ecológicos.

Contactar con un profesional también puede ser una solución si lo que queremos es hacer un mantenimiento cumpliendo los mínimos estándares de seguridad para nuestra salud y las de las mascotas que están en contacto con la zona.