El avispón asiático va a convertirse en un problema importante dentro de la península ibérica durante los próximos años. Por esta razón es muy importante saber cuáles son las diferencias entre avispón asiático y avispa que conocemos. De esta forma seremos capaces de identificar la especie y, por un lado, no alarmarnos si no es necesario y, por otro, avisar a las autoridades competentes correctamente. A continuación vamos a ver cuáles son las diferencias entre la avispa negra y otras especies de insectos.
¿Cómo es el avispón asiático?
Lo que más llama la atención de la avispa negra (vespa velutina) es, principalmente, su color. De hecho, es la avispa más oscura que existe en Europa. Existe la creencia común de que es más grande que otras avispas que conocemos, aunque no tiene por qué ser así.
Al ser una avispa muy agresiva (ataca con más facilidad que otras especies, de forma más virulenta y provocando reacciones alérgicas a las que todavía no estamos tan acostumbrados a tratar) es importante tener estos puntos claros.
A continuación vamos a ver cuáles son las características más relevantes del avispón asiático:
Cuerpo muy oscuro
La avispa negra, como su propio nombre indica, tiene el cuerpo muy oscuro (casi negro). Aunque varía, sus tonalidades siempre van desde el marrón oscuro hasta el negro, con escasos dibujos que lo rompan. Si existen, estos consisten en zonas amarillas y anaranjadas.
Banda amarilla
La avispa negra presenta una banda amarilla en el borde apical de los tergos primero y segundo (la parte dorsal de los anillos de su exoesqueleto). El tercer y, sobre todo, el cuarto anillo, tiene una banda anaranjada. El resto de anillos o tergos son completamente marrones oscuros, con una tonalidad que puede confundirse con el negro.
Parecen manchas oscuras en el nido
Los ejemplares adultos, por contraste, parecen manchas oscuras sobre el nido. Esta es una de las cualidades que les ha dado el nombre de ‘avispa negra’, y una de las diferencias entre avispón asiático y la avispa común más fácilmente reconocibles.
Tórax aterciopelado
Como otras avispas, el avispón asiático presenta un tórax aterciopelado. Su tono oscuro impide que esto se pueda apreciar en su vuelo normal, pero lo importante es saber que no es una característica diferenciadora de otros insectos y avispas.
Cabeza negra y cara anaranjada
El avispón asiático presenta una cabeza negra que se rompe por la parte de la cara, de un tono más anaranjado. En ocasiones esto último es todavía más suave, tornándose amarillo.
¿Cómo de grande es el avispón asiático?
La avispa negra, a diferencia de la Vespa Cabro (la autóctona de Europa) es un poco más pequeñas en la mayoría de los casos. Las avispas asiáticas obreras miden entre 17 y 32 centímetros, aunque las reinas pueden superar este tamaño con facilidad. Lo que sí diferencia al avispón asiático de las avispas autóctonas es que, al tener un rango de tamaño más amplio, no podemos tomar esta referencia para identificarlas.
Conclusión: cómo diferenciar el avispón asiático de las avispas autóctonas y qué hacer
La manera más adecuada de identificar la avispa negra es por su color. Como cuando avistamos una no tenemos posibilidad de compararla con nada, basta decir que si es muy oscura es probable que lo sea. En estos casos lo más adecuado es contactar con una autoridad local para avisarles de la posibilidad de que hayamos visto una avispa que tiene la categoría de especie invasora para que actúen en consecuencia.
Si creemos que tenemos una avispa asiática en nuestra propiedad privada deberemos acudir rápidamente a una empresa de control de plagas que esté especializada en este tipo de insectos. Y decimos especializada porque, al no ser un insecto habitual (de hecho no se comporta como el resto de avispas, siendo mucho más agresiva), no se puede ni debe tratar de la misma manera.